Cd. Delicias, Chih.- Momentos de tensión, angustia y tragedia viven habitantes de la colonia Campesina. Uno de sus vecinos, de tan solo 25 años, murió atrapado en el baño mientras su vivienda se consumía en llamas.
Las llamas no solo devoraron una casa, sino que apagaron la vida de un joven de apenas 25 años: Lorenzo Quiñones. El incendio ocurrió en la calle 13, número 610, y marcó para siempre la memoria de los vecinos.
Lorenzo, cuentan algunos, era un muchacho que vivía una lucha silenciosa con el consumo. En el momento del siniestro se encontraba solo dentro de la vivienda.
Testigos afirman que no pudo salir y nadie pudo entrar a ayudarlo debido a que el fuego bloqueó las ventanas. Fue imposible su rescate antes de que llegaran los bomberos. Lo cierto es que, cuando el fuego comenzó a expandirse, él no logró salir.
Los bomberos llegaron en las unidades 21 y 22. Lo encontraron en el baño, uno de los lugares más vulnerables ante el calor extremo.
Tal vez pensó que ahí estaría más seguro, que las llamas tardarían en llegar. Pero el fuego no perdona. El ambiente estaba cargado de humo y combustible, lo que dificultó aún más los esfuerzos de los rescatistas.
«El acceso hasta aquí es complicado. La colonia está algo retirada y eso nos hizo perder minutos valiosos», lamentó uno de los elementos del cuerpo de bomberos. Minutos que pudieron marcar la diferencia, expresó Alejandro Chavarría, jefe del Departamento de Bomberos, quien estuvo en el lugar encabezando las maniobras.
Hoy, entre escombros y cenizas, queda el recuerdo de Lorenzo. Un joven como tantos, con sueños, con errores, con batallas internas. Su historia termina entre fuego, pero merece ser contada con la humanidad que no siempre encontró en vida.
