Miguel Ruiz, Médico forense, amigo, hermano; a sus 32 años, su partida el pasado martes en su hogar de Estación Consuelo en Meoqui Chih, ha vestido de luto al IMSS y a la Fiscalía.
Miguel no solo fue un profesional ejemplar, sino un ser humano que marcó vidas con su sonrisa, su compromiso y su calidez.
En el IMSS, sus pasos resonarán siempre; en la Fiscalía, su vocación y generosidad perduran.
“Miguel, te extrañaré siempre. En mi corazón queda tu sonrisa, tu compromiso y ese pendiente del que hablamos. Algún día, iré a buscarlo… Abrazos hasta el cielo”, escribió una compañera, eco de un dolor compartido.
No es fácil despedir a quien creció entre nosotros, dejando amor y recuerdos que no se apagan.
Gracias, Miguel, por tanto. Tu luz no se extingue: se multiplica en mil memorias.
Descansa en paz, compañero, mientras Estación Consuelo y quienes te amaron te llevarán en el corazón. 
